24 y 25 de agosto - "Siempre hay ganas de marcha"

Empieza nuestra jornada maratoniana de viaje a las 15.30 de la tarde en Pamplona, 4 horitas hasta la T4, dejamos el coche en larga estancia y a facturar.


Volamos en Emirates, por fin operan en España, vuelo ida y vuelta a Hong Kong desde Madrid 700€, lo cierto es que hay compañías más baratas, pero los horarios de Emirates nos encajan como un guante y encima tenemos el aliciente de que a la vuelta tenemos tiempo de visitar Dubai y encima la mitad del viaje a Hong Kong se hace en un Airbus A380, para los despistados, el avión comercial más grande del mundo ;)


Check in sin problema, un par de horitas por el aeropuerto y a las 22 partimos hacia Dubai. Vuelo de 7 horas sin problema, el cansancio hace estragos y hasta hemos dormido unas cuantas horas. Habíamos oído cosas buenas de Emirates, y la verdad que son ciertas, no es que vayas en alfombra voladora, pero la comida, el servicio, la pantalla y el asiento de lo mejor que hemos probado en un avión, y ya con el enchufe en el asiento nos acaban de conquistar, eso es la vida cuando ves que tu iPad está al 5% de batería jeje


Vuelo cómodo y llegada a Dubai que nos recibe con 35 graditos de nada a las 7 de la mañana hora local. Pequeña escala de dos horas, que nos sirve para visitar la enorme terminal del aeropuerto internacional de Dubai, repleto de aviones de Emirates. La verdad que había oído cosas como que era impresionante y demás, en mi opinión como todos los aeropuertos del mundo, un lugar donde estar el mínimo tiempo posible de tu vida :)


Sabíamos que estábamos en un país árabe, pero nos llama la atención la cantidad de mujeres que van tapadas con burkas hasta el suelo, con únicamente dos orificios para los ojos. Sinceramente, ver a una chica tropezándose con su propio atuendo a punto de caerse al suelo es algo que me parece lamentable e injustificable bajo ningún tipo de creencia en el siglo XXI, pero en fin esto va de viajar y me guardo mi opinión para otros blogs.


Cambiando de tema, embarcamos a tiempo en el A380 que nos llevará a nuestro destino final tras 8 horas de vuelo, que se convierten en 9 por un retraso en la partida del avión por atasco aéreo (qué cosas). Por cierto, la verdad que este es un avión mucho mas cómodo que la media, las piernas se pueden estirar por completo (andamos por encima del 1,80 ) y los servicios al igual que en el anterior vuelo, son de lo mejor en una clase turista que te puedes encontrar. Encima tienen wifi! Aunque después de los primeros momentos de ilusión el precio de 2€ por 5 megas nos hace desistir, pero bueno para whatsappear no está mal quizá en la vuelta :)

El A380 cómodo cómodo

Llegamos con hora y media de retraso a Hong Kong, son las 23 hora local, pero la ciudad no está ni mucho menos muerta. Tras recoger el equipaje nos dirigimos a la parada de metro del aeropuerto, y compramos la tarjeta de prepago octopus en el mostrador justo antes de llegar al andén, ya iremos hablando de la tarjeta, pero presiento que va a ser una de las sensaciones del viaje.


Hong Kong nos recibe con ese calorcito pegajoso que tanto nos gusta y que mucho me temo no nos abandonará hasta nuestra llegada a Madrid. A pesar de ser la 1 am hora local de un sábado, se ve vida en la calle. Andamos un poco bajo los neones de colores de los establecimientos y por fin llegamos a nuestro hotel en Causeway Bay, en la isla de Hong Kong.

Aspecto de Lan Kwai Fong

El merecido descanso nos esperaba, pero como nuestra filosofía es que ya descansaremos dentro de la caja de pino, ducha y para Central que se barrunta marcha. Al salir del hotel paramos a un taxi que no nos quiere llevar, menos mal que mágicamente se abre la puerta de otro a unos pasos de allí. Nos dirigimos a Lan Kwai Fong donde habíamos leído que se movía ambiente nocturno, y la verdad que no nos defraudó, mucho ambiente en la calle como no había visto fuera de España y bares de todo tipo, tranquilos, cool, de barro total,... eso sí en muchos de ellos mucha chavalada, igual es que nos estamos haciendo mayores para estas cosas jeje
La cosa como era de esperar se complicó hasta las 7 de la mañana, previa visita al amigo Ronald McDonald. Lo pasamos bien y disfrutamos del ambiente de marcha chino, un poco soso pero con su encanto, muchas chicas y muchas guapas ;) Los precios, la verdad que para estar en Asia quizá caro incluso más que en España a las copas me refiero, porque los taxis y la comida son baratísimos (3€ un menú en McDonalds).

Dos cervecitas hongkonesas XD

Y por hoy ya vale mañana será un día duro, cerveza+ron+whisky on the rocks no es nada bueno para tu cerebro.